Ese mapa fue un trabajo de encargo que, en principio, no me apetecía demasiado. La idea de una cartografía exhaustiva y precisa me resultaba muy rígida, pero poco a poco fui reconciliandome con el proyecto. Descubrí que toda cartografía responde a una cosmovisión, a una ideología, y que mi cosmovisión de Santiago era tan válida como cualquier otra.
En la imagen, los lugares y las personas son sobre todo referentes emotivos de una ciudad orgánica, vibrante, con la que nos identificamos en tanto que está viva. La localización y el tamaño de las cosas responde a un registro subjetivo, pero ¿quien sabe? quizá este registro nos acerque a una íntima realidad de Santiago de Compostela.
Hoy día se ha convertido en un clásico.
Cartografía personal en acuarela y collage reproducida en Offset.
Tirada de 1000 ejemplares. (Actualmente 4ª edición)
Formato 50X70 cm, enrollado en tubo de cartón con pegatina.
Presentación en la Fundación Granell, Santiago de Compostela, 31 de agosto de 2014.
(Se vende a 15 euros con envío incluido, -cielos que barato!- enrollado en un excitante tubo de cartón con pegatina)